Vía de conocimiento evolutivo








El tarot es una conexión con la Divinidad, es una vía de interpretación de la energía del camino evolutivo, por ello no basta con saber interpretar las laminas como cotorras, sino poder sentir desde esa conexión para poder interpretar el mensaje para el consultante, aunque aun así es muy difícil a veces traducir en palabras los porqués de sus circunstancias, por sentir que el desconocimiento del consultante a veces es una barrera a lo que significa realmente ese mensaje. La interpretación a veces no es tan simple como decir que dos y dos son cuatro.
 Para que fuese valido todo el contenido del mensaje el receptor tendría que saber un poco más de cómo funciona lo que recibe así como el transmisor tendría que tener el conocimiento necesario para poder interpretar desde lo más mundano como lo más espiritual.

Ritual de equinoccio de Primavera:


Como ya sabemos la Primavera comienza a 21 de marzo dando lugar al equinoccio de Primavera momento del año en que el Sol está situado en el plano del ecuador terrestre donde alcanza el cenit. El Sol esta en el primer punto de Aries, los equinoccios son el instante (o la fecha, en un sentido más general) en que suceden determinados cambios estacionales, en Primavera y Otoño.
Para este cambio realizaremos este ritual:

Material:
1 vela blanca
1 vela verde
Incienso
Semillas de trigo o de cualquier otro cereal
Una maceta con tierra, si no vives en el campo.

Ritual:
Encendemos las velas y el incienso con cerillas de madera, delante de la maceta o del sitio donde nos deponemos a sembrar las semillas.

Pedimos a la Madre Naturaleza que nos bendiga con sus frutos, que nos proteja, que nos envíe todo lo mejor para nuestra vida (salud, paz, amor etc) y agradecemos su generosidad y de que se realicen nuestros deseos.
Mientras decimos el ritual sembramos las semillas en la tierra.

Cuando acabemos regamos la tierra y dejamos que se consuman las velas y el incienso.
 

Vergüenza ajena

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Con el mayor de los respetos hacia la gente que realmente amamos el tarot y respectamos lo que realmente representa, en toda su esencia Divina y tratamos de ayudar desde la más respetuosa claridad y trasparencia, sin necesidades de trampas ni cartón.

Últimamente estamos siendo espectadores de un cada día más deteriorado mundo esotérico, de un sinfín de gente que lo maneja creando un circo, un show de parafernalia verdaderamente vergonzosa y repugnante, del manejo de lo que debería ser un  mundo respetable y serio en esencia.

Gente manipuladora que no tiene ni idea de lo sagrado que es el manejo de las energías, las manejan de forma deplorable en shows televisivos para atrapar a gente ignorante de lo que está viendo, sin embargo esos mismos shows alejan cada vez más a gente del verdadero sentido del Tarot o cualquier otra mancia, e incluso alejan a la gente que al ver este deplorable espectáculo cada vez cree menos en ellas, alejándolas del conocimiento que representan.

Han convertido el Tarot en un burdo comercio camuflado detrás de lo espiritual, esto no quiere decir que no se deba cobrar por leer el tarot, porque vivimos en un mundo donde todos tenemos que comer, así que el médico cobrara por sanar, el carpintero por hacer una silla y el pescador por pescar, que no nos equivoquemos que lo espiritual es distinto, porque es una vocación como cualquier otra y aquel que enfoca a su vida en ese sentido también come. 

Pero no seamos hipócritas, intentando esconder ese cobro detrás de luces que ciegan, hagámoslo limpiamente, sin falsos manejos de la mente ajena con engaños e ilusionismos.
Charlatanes  que se denominan a sí mismos maestros, guías, enviados especiales, seres iluminados, elegidos  etc, equivocadamente ignorantes de su ego, quieren dar a entender que son más especiales que otros, dicen tener dones, que de ser ciertos jamás les dejarían actuar de las formas que se manejan, porque la verdadera Luz no deja que se ciegue nadie.


El guía ayuda desde la humildad hacia aquel que quiere oír su conocimiento, no le hace falta propagar lo que sabe de manera tan abrupta, porque realmente no lo necesita, además de que no necesita que nadie sepa el cuanto sabe, el cuanto brilla, y cuantos milagros hace, porque su sabiduría es lenguaje suficiente y será emanada  y expandida con naturalidad, llegando a quien tiene que llegar sin necesidad de ropajes estrafalarios y ademanes sospechosos, para dar a conocer o transmitir lo que lee en una tirada de tarot.

Quien  realmente conoce lo que representa el Arte Sagrado, sabe que la humildad con que se debe manejar el Tarot o cualquier otra mancia es la base fundamental de todo conocimiento y nunca se es maestro de nada, visto que la evolución es un continuo y profundo aprendizaje de lo que esta creado y que nadie tiene el conocimiento total de lo que existe, solo Dios.

Por lo tanto, debemos tener nuestros ojos abiertos en estos momentos tan inciertos, y de tanta confusión que vivimos, para cerciorarnos si lo que otros dicen concuerda con lo que hacen.
 Jesús dijo “Por sus frutos los conoceréis”, porque quiso que supiéramos ver a través los corazones de los demás, por sus acciones, que no fuéramos ciegos a las acciones que nos están enseñando, sino que a través de ellas supiéramos quien son.

<<Mirad que nadie os engañe. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo (ungido); y a muchos engañarán…>>
Frases plasmadas en el Evangelio, que se traducen como que la estela de un individuo se construye a través de sus palabras, actos y acciones que marcan su trayectoria y construyen su reputación.

Quien tenga oídos que oiga.

Por favor no seamos ovejas, con todo el respecto a las mismas.
Lilith


Conocimiento del funcionamiento del Tarot

El tarot es un traductor energético de las circunstancia de la vida.

Si tenemos la comprensión de que en la vida nada está cerrado al cambio, porque entendemos que tenemos pleno albedrio de nuestros comportamientos, porque así funciona la evolución espiritual humana a nivel físico,  entonces tenemos que entender también que la lectura del Tarot, donde se plasma las circunstancias  que vivimos nosotros o otros, también pueden cambiar según cambien nuestras decisiones en el momento presente.

Cuando se realiza una lectura del Tarot, esa lectura nos traduce o nos da a ver, la voluntad de la persona en ese instante del presente, de lo que esa persona piensa hacer más adelante, de lo que está dispuesta a realizar, de sus deseos en  ese momento donde su voluntad esta puesta para que así se proyecten en el futuro. Pero nada es algo ya cerrado, si su voluntad cambia en cualquier momento del presente que vive, esa voluntad también cambiara el futuro.
 Así que, aun cuando hayamos visto una situación futura en la lectura del tarot no quiere decir que esas circunstancias que hemos visto  no cambien, es cierto que en una lectura, el tarotista se puede equivocar en la interpretación de las cartas, pero hay que tener en cuenta que las circunstancia vistas también pueden cambiar según lo mencionado anteriormente.
Hay mucha gente que cuando acude a consultar el Tarot piensa que lo que le está diciendo el tarotista es algo ya inamovible, algo ya cerrado y nada está cerrado en el futuro, lo único cerrado es el pasado, porque ya es algo realizado algo que ya no se puede cambiar, pero el futuro e incluso parte del presente no realizado se puede cambiar según esa ley universal del libre albedrio.
Cierto es que hay situaciones que el individuo tiene que pasar para su aprendizaje, cosas que están estipuladas con anterioridad a nuestra reencarnación y esas circunstancias sí que son inamovibles, pero aun teniendo que vivir determinadas situaciones, el cómo se desarrollaran esas circunstancias es algo que el individuo hará según su entendimiento en el momento que lo experimenta, dependerá de lo que haya aprendido anteriormente, de su nivel de compresión de la situación que se le presenta y eso se hace en el momento de la vivencia.

Decir y afirmar al consultante “esto es así y seguro que se realizara así” es un timo que muchos utilizan para tener al que consulta engañado de  cómo funciona realmente  el Tarot y del desarrollo de las cosas que quiere saber.
Aquel que realmente maneja el Tarot de una forma espiritual, con consciencia, con amor hacia el próximo y respecto hacia este conocimiento, siempre tiene que hacerlo desde una forma real, tiene que ejecutarlo desde el conocimiento de lo que significa el Tarot, debe conocer en profundidad el Tarot, si no, estará manejando algo sin verdadero y necesario conocimiento de este simbolismo energético Divino.

  Al consultante se le debe informar sin trampas, pero si con transparencia, lo que le marcan sus cartas, su tirada, haciéndole comprender que su manera de proceder y actuar  le llevaran a los resultados que se ve en la tirada.
 Así, el que consulta, puede tomar decisiones al respecto a su comportamiento si quiere obtener en el futuro algo distinto a lo que se proyectara si no cambia de actitud.
También debe de saber el consultante que las cosas que dependan de actitudes ajenas no las puede cambiar, porque no está en sus manos la voluntad ajena, solo puede saberlas o conocerlas por lo que sale en la tirada, pero nunca modificarlas y siempre tendrá que tener en cuenta que lo que se ve en ese momento, puede cambiar si la persona implicada en la cuestión cambia de actitud o pensamiento antes de que se puedan producir los hechos, porque  estos hechos siempre están supeditados a su voluntad personal.
Y así funcionan todas las mansias.
Lilith








¿Está cualificado espiritualmente todo aquel que hace uso del manejo del tarot profesionalmente?


El  tarot es un medio de interpretación energético entre consultante y tarotista.
Un buen intérprete es un traductor energético y un  conocedor del universo de esta creación.
Cuando en algún momento queremos saber las situaciones que vivimos y de sus porqués, cuando queremos saber lo que nos depara las situaciones futuras, que no son otras que las consecuencias de nuestras vivencias  actuales y pasadas, recorremos al tarot para que nos diga a través de su simbología lo que refleja la energía de nuestras situaciones, actitudes, decisiones,  pensamientos etc.  en nuestra vida. 

Al conocer lo que nos indica el tarot, transmitimos al consultante lo que refleja su tirada y si nos pide,  podemos  ayudar y aconsejar  a reflexionar sobre las situaciones que le provoquen sufrimiento para que  pueda transformar  conductas que de alguna forma, no sean las más indicadas para su propio equilibrio emocional.

Lo que constato muchas veces es que no se utiliza el tarot de una forma consciente de lo que representa el poder llegar a ver  y entender las situaciones que nos toca vivir, he constatado que se utiliza y maneja de forma muy poco espiritual, muy poco constructiva, utilizando este medio para  hacer creer que a través de la lectura se puede modificar las situaciones aun cuando el propio consultante no hace nada para esa modificación, que no puede ser otra que a propia transformación individual, desde la consciencia de lo que le ha provocado esa situación que vive.

Mucha gente que se dedica al tarot, lo mezcla con otras artes muy poco aconsejables, mezclando encantamientos, hechizos, rituales oscuros para atraer parejas, manejos de energías negativas, invocaciones del más allá etc. Hacen creer que todo vale y que nada tiene una consecuencia muchas veces nefasta para quien lo practica y a quien es dirigido.  

La mayoría de personas no son conscientes del valor real de tales triquiñuelas, no saben realmente lo que están haciendo, e inducen a los demás a que lo hagan, no profundizan  en el valor de cada acto que no es licito a nivel espiritual, en las repercusiones  de un mal manejo de energías que van en contra de nuestra propia evolución y del respeto al otro, de la salud emocional y incluso física, cuando todos deberíamos saber de que todo lo que se hace tiene sus consecuencias  y que la manipulación oculta de voluntades ajenas sin su consentimiento no trae a la larga ningún resultado bueno.

Puedo entender que quien hace este tipo de trabajos es ignorante a cuanto lo que significa la existencia en sí misma,  a los principios Universales Divinos y del  propósito del funcionamiento de todo lo creado,  de lo que significa el karma,  ignorante de una conducta con verdadera consciencia, autentica, necesaria y esencial  para todo aquel que quiere ser una vía de canalización del conocimiento y interpretación del tarot o cualquier otro medio de ayuda al que lo requiere.

 ¿Cómo pueden hablar de amor si no saben su significado? El amor es algo natural que se da  y se recibe sin tener que “comprarlo” de forma manipuladora, se habla de luz cuando viven en la más profunda oscuridad de entendimiento. 

Es cierto que en muchos casos la persona que consulta este tipo de mancias, no acepta con facilidad las respuestas cuando no son las que supone  debería oír, ya porque no son las de su agrado o porque no van de acuerdo con lo que desea que fueran. Pero claro está, el que lee el tarot no puede decir nada distinto a lo que ve, aun cuando lo que ve no sea agradable o del gusto del consultante.

 Pero  todo esto no es razón para inducir al consultante a manejar las situaciones de forma inconsciente, llevando a las personas a practicar actos que más tarde tendrán sus consecuencias, y eso no se les informa, porque en el fondo es una manera de “enganche” de clientela fácil, dependiente de tener el poder de manejar las situaciones a su antojo.

Todos sabemos que tenemos plena libertad, libre albedrio, que se nos otorga cuando somos creados por nuestro creador, para pensar y  actuar, pero esta libertad esta para que aprendamos a ser y a estar cada vez más capacitados para discernir  los caminos correctos hacia la realización de nuestro ser espiritual evolutivo, y para ello es necesario que nuestras acciones sean de acuerdo a lo que queremos ver realizado en nuestras vidas, aprendiendo desde el amor más verdadero hacia  los demás y hacia nosotros mismos.   

Lilith

El origen






El Tarot es uno de los medios de comunicación con el subconsciente más antiguos que se conocen, su interpretación nos puede sugerir el perfil de la persona que pregunta y el ámbito de personas que le rodean, sus relaciones, circunstancias, sentimientos, propios y del entorno del consultante.


El origen del tarot es el antiguo Libro de Thoth, cuyos sacerdotes lo redujeron en principio a 42 arcanos. Mucho después sufrió una nueva reducción por parte de los judíos de Alejandría con el fin de adaptarlo a su alfabeto de 22 letras.
 Los sacerdotes de Thoth pensaron que la mejor manera de preservar la antigua sabiduría entre los bárbaros, (los griegos de Alejandro), era en forma de juego, ya que los generales de Alejandro eran bastante incultos, pero muy dados al vino y al juego. No les faltó razón, aunque desde luego lo que no pudieron prever fue el intento hebreo de adueñarse de la tradición y hacerla suya incluso mutilándola. 


Los gitanos (egiptanos) tribus parias expulsadas de la India y asentadas en Egipto en tiempos de los lágidas, contribuyeron a su posterior difusión por Europa  y lo usaron sobre todo para las predicciones del futuro (aunque nunca fue diseñado para eso) al tratarse de un sistema coherente de complejos simbólicos de origen neolítico.

Aunque ha sufrido cambios en la interpretación, así como en las ilustraciones, el tarot suele ser el mismo. Se compone de 78 cartas: 56 arcanos menores que dieron origen a la baraja de naipes (cuatro palos o elementos compuestos cada uno de diez números, sota, caballo y rey, desapareciendo la reina en algunos juegos y permaneciendo como dama en otros) y 22 arcanos mayores que consisten en unas cartas misteriosas de profundo significado esotérico.